Esta es una de esas recetas cuya complejidad reside en
pesar los ingredientes, meterlos en un bowl
y pasarlos por la batidora.
Ingredientes
300 gr de leche condensada
300 ml de nata para montar
2 cucharillas de café instantáneo en polvo
1 chorrito de licor café
Elaboración
Tan sencillo como mezclar todos los ingredientes en un bowl, con las varillas, buscando cierta consistencia. Ojo que salpica bastante. Aunque la mezcla no se llega a montar, pasados unos minutos, puede alcanzar a una textura parecida a la de un mousse. Finalmente se mete en el congelador y después de tres o cuatro horas, se podría consumir.
Aunque no cristaliza (lo cual es muy de agradecer al hablar de helados caseros hechos sin heladera) puede que si tenemos el congelador a una temperatura muy baja, quede como una piedra.
Si es así, es mejor sacarlo fuera un rato antes de servir.