El Crumble es de esos postres sencillos que lo "petan".
Todo un acierto para cualquier sobremesa informal o sofisticada.
Si lo queremos hacer en plan tarta,
habría que ponerle una base de masa quebrada.
La gente lo suele acompañar con una bola de helado.
Ingredientes
4 manzanas
120 gr de azúcar
120 gr de mantequilla
180 gr de harina
1 cucharilla de canela
Elaboración
Pelamos las manzanas y las cortamos en pequeños dados.
(se le pueden incorporar algunos frutos rojos o hacerlo de pera, melocotones...)
En una tartera las salteamos con una cucharada de mantequilla.
A fuego medio y con un corrito de agua, las hacemos al estilo compota.
Cuando estén blandas, lo espolvoreamos todo con la canela.
En un bowl mezclamos la harina, el azúcar y la mantequilla pomada.
Con la mano o con la ayuda de una cuchara de madera.
El resultado final ha de ser el de una especie de migas.
En una fuente de pirex o en pequeños cuencos de porcelana,
cubrimos la base con las manzanas.
Después, lo tapamos con la mezcla del bowl.
Si lo hacemos en cuencos pequeños, el horno a 200º unos 10-15 min.
En la fuente, también a 200º hasta que se dore la parte superior.